Qué ver en Berna 【Guía completa】

Si estás planeando una visita a Berna, la capital de Suiza, y te estás preguntando qué ver en Berna y qué hacer, o si realmente merece la pena el viaje, esta guía está diseñada para ti. Aquí compartiremos las mejores actividades y algunos consejos para tu estancia. ¡Esperamos inspirarte a descubrir Berna!

Berna destaca por su singular belleza, diferenciándose notablemente de otras ciudades suizas. Desde sus arcadas cubiertas hasta su reconocimiento como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, la ciudad desprende un encanto único y una atmósfera de tranquilidad. A pesar de ser la capital, Berna es relativamente pequeña y ofrece una experiencia distinta en comparación con las grandes capitales europeas.

La ciudad es un pintoresco lienzo de arquitectura medieval perfectamente conservada, salpicada de tesoros culturales e históricos. Además, su tamaño compacto y fácil navegación permiten explorarla cómodamente a pie. Casi todos los lugares emblemáticos y puntos de interés mencionados en esta guía se encuentran a poca distancia uno del otro.

Ante la abundancia de atracciones, puede resultar complicado decidir cuáles incluir en tu itinerario. Por ello, nos hemos concentrado en destacar únicamente los lugares y actividades más sobresalientes de Berna, aquellos que realmente valen la pena, especialmente si es tu primera visita a la ciudad.

Para facilitarte la planificación, hemos incluido un mapa de las atracciones de Berna al final de este artículo, junto con información práctica para tu visita.

Mejores cosas que hacer en Berna

Explorar Berna, la capital suiza, es adentrarse en un mundo donde la historia y la belleza conviven en cada esquina. Aquí tienes una guía de lo imprescindible:

La Ciudad Vieja de Berna

Empezando por su corazón medieval, la Ciudad Vieja es un imprescindible. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, se asienta majestuosamente en un acantilado, rodeada por las aguas azules del río Aare. Lo que realmente la distingue son sus edificaciones históricas, las banderas a todo color y las fuentes tradicionales que parecen sacadas de un cuento.

Es el hogar de los monumentos más emblemáticos de Berna, incluyendo numerosas fuentes, la famosa Torre del Reloj, estatuas antiguas y puentes impresionantes que cruzan el Aare. Pasear por aquí es sumergirse en una cápsula del tiempo, donde cada rincón cuenta una historia.

Tras un devastador incendio en 1405, la Ciudad Vieja se reconstruyó con imponentes edificaciones de arenisca, todas uniformes y con arcadas en sus bases, hoy llenas de cafés, restaurantes y tiendas. Estas arcadas forman parte de la promenade de compras cubierta más extensa del mundo, según la oficina de turismo local.

Las cuatro calles principales —Spitalgasse, Marktgasse, Kramgasse y Gerechtigkeitsgasse— se despliegan desde la estación central y fluyen tan naturalmente que parece una sola gran avenida. Aunque no es exclusiva para peatones, el tráfico es mínimo, lo que permite un paseo agradable.

No dejes de explorar el resto de la Ciudad Vieja, especialmente la Rathausplatz, con el Ayuntamiento de Berna y la Iglesia de San Pedro y San Pablo. Las callecitas secundarias, menos transitadas, esconden edificaciones encantadoras y plazas que merecen una visita.

Consejo: Si tu tiempo es limitado pero quieres captar la esencia de Berna, considera unirte a un tour guiado por la Ciudad Vieja. Con una duración aproximada de 1.5 horas, es una excelente manera de introducirte a la ciudad.

Las Fuentes de Berna

Berna sorprende con sus 100 fuentes públicas, cada una con su propia historia y muchas ofreciendo agua potable a quien la necesite.

Las más destacadas son las 11 fuentes renacentistas del centro, obra del escultor suizo Hans Gieng del siglo XVI. Estas fuentes son famosas por sus esculturas policromadas, representando tanto a dignatarios de la historia de Berna como a figuras simbólicas como Moisés o la Dama Justicia.

La Zähringerbrunnen, cerca del Zytglogge, es famosa por su estatua de un oso armado, símbolo de la ciudad. La Läuferbrunnen, en honor al poder de Berna, también atrae miradas.

Originalmente, Berna contaba con fuentes de madera, reemplazadas luego por estas versiones en piedra que se convirtieron en puntos de encuentro comunitarios. Hoy siguen siendo centrales en la vida de la ciudad, acogiendo desde mercadillos navideños hasta reuniones sociales.

Dato curioso: La Kronenbrunnen, en Postgasse, es peculiar por ser una fuente que carece de escultura en su cima. Es un lugar popular para fotos, donde puedes subir y posar en el lugar destinado a la estatua ausente.

Catedral de Berna

La Catedral de Berna, también conocida como Berner Münster o Catedral de San Vicente, se erige en el corazón de la Ciudad Vieja. Iniciada en el siglo XV, ostenta el título de la catedral más alta de Suiza, una obra maestra del gótico realizada en arenisca. Su gran atractivo es la impresionante aguja, que no se completó hasta 1893, elevándose a más de 100 metros. Para los más aventureros, hay disponible una subida de 254 escalones hasta su cima, una experiencia que vale cada paso.

Dentro de la catedral, el espectáculo continúa. Al entrar, te recibe el Juicio Final, una impresionante representación de pecadores desnudos y justos vestidos en torno al Arcángel Miguel, tallados en piedra y madera. No menos excepcionales son sus vidrieras, destacando la Danza de la Muerte de la Capilla Matter.

Atención merecen también los sitiales del coro, tallados con minuciosidad en el siglo XVI, la fuente gótica en el ábside y un órgano barroco del siglo XVIII de imponente belleza.

La Catedral de Berna sigue siendo un lugar activo de culto con servicios religiosos cada fin de semana.

Si te sientes con energías, la subida a la torre del Berner Münster es imprescindible. Las vistas panorámicas son espectaculares, ofreciendo una perspectiva única de Berna a tus pies. ¡Es el mejor mirador de la ciudad!

Dentro de la torre, te espera la campana más grande de Suiza, la "Grosse Glocke", de 10 toneladas, junto con otras campanas históricas que datan desde el siglo XIV al XIX.

Es bueno saber: No se permite el acceso a la torre con bolsos o mochilas. Yo llevé un bolso muy pequeño y tampoco fue permitido. Por suerte, disponen de taquillas seguras para dejar tus pertenencias.

Consejo: Si prefieres disfrutar de las vistas sin subir, la terraza Münsterplattform detrás de la catedral es el lugar ideal. Desde aquí, se tiene una vista privilegiada sobre el río Aare y la ciudad.

Torre del Reloj Zytglogge

La Zytglogge es uno de los emblemas de Berna. Este reloj, que data del siglo XII, es uno de los vestigios de las primeras murallas de la ciudad. A principios del siglo XVI, se le añadió un reloj astronómico que marca las horas desde entonces.

Te recomiendo llegar a Marktgasse unos minutos antes de la hora para disfrutar del espectáculo de figuras mecánicas que realizan un pequeño show al sonar el reloj.

Consejo: Para conocer el interior de la Torre del Reloj, vale la pena reservar este tour muy bien valorado.

En este tour de una hora, también tienes la oportunidad de subir los 130 escalones hasta la plataforma de observación. Las vistas de los tejados de la ciudad son un regalo para la vista. Es el tour más popular de Berna, así que te aconsejo reservar con antelación.

Es bueno saber: Durante la temporada alta (abril-octubre), el tour por la torre del reloj Zytglogge se ofrece diariamente, excepto martes y jueves. En temporada baja, suele ser solo los sábados. Aquí puedes verificar la disponibilidad y reservar tu lugar.

Käfigturm

El Käfigturm, otra torre medieval de Berna, formaba parte de la antigua puerta de la ciudad. Con un reloj coronándola, su arquitectura es digna de admiración. Hoy, los tranvías pasan directamente bajo el arco de la base de la torre, donde antaño se encontraba la puerta de la ciudad, un espectáculo curioso de ver.

La torre tiene una historia un tanto lúgubre; construida a principios del siglo XIII, primero sirvió como torre de defensa y más tarde como prisión. Se dice que aún pueden verse los mensajes que los prisioneros dejaron grabados en las puertas de sus calabozos...

Hoy en día, el Käfigturm tiene un papel menos sombrío y se utiliza para debates políticos.

Es bueno saber: El Polit-Forum Bern ofrece visitas guiadas gratuitas de la torre. Aunque no es imprescindible visitar su interior para apreciar su valor histórico, siempre es una opción para los interesados.

Foso de los Osos

Los osos son el símbolo de Berna y uno aparece en el escudo de armas de la ciudad. Cuenta la leyenda que el fundador de la ciudad, Berchtold V. von Zähringen, fue de caza en el bosque circundante y un oso fue el primer animal que capturó. ¡A este oso le debe la ciudad su nombre!

El primer oso que se mantuvo en Berna fue traído como botín de guerra después de una batalla. Se mantuvo frente al Käfigturm, en el foso de la ciudad. Los osos han continuado siendo mantenidos en Berna desde entonces, y fueron trasladados al Bärengraben (o Foso de los Osos) en 1857.

El Foso de los Osos es una visita gratuita y es una de las atracciones más populares de Berna. ¡No puedes venir a Berna y no ver sus osos!

Cubriendo una gran área junto al río, el Foso de los Osos comprende dos recintos conectados por un túnel. Uno es el pozo original, más antiguo, que era bastante básico y no ofrecía a los osos un ambiente muy agradable en el que vivir. El segundo, que también puedes ver desde arriba, es mucho más nuevo, está ricamente forestado y es mucho más grande.

El área que rodea el Foso tiene varios caminos pintorescos y hay un ascensor que conecta los niveles superior e inferior. Las mejores vistas son desde la parte superior.

Actualmente, hay cuatro osos mantenidos aquí: Byörk, Finn y sus crías Ursina y Berna. Si tienes suerte, puedes verlos jugando a luchar o comiendo sus alimentos favoritos: melones y manzanas. Cuando visitamos, los osos estaban merodeando en la parte forestal de su gran recinto. Incluso entonces todavía podíamos verlos, pero se requería un poco de paciencia.

Consejo: Los osos hibernan entre octubre y marzo. Así que si visitas Berna en invierno, solo puedes verlos a través de una webcam.

Rosengarten

No muy lejos del Foso de los Osos se encuentra el hermoso Parque del Jardín de Rosas (Rosengarten) de Berna. Ubicado en lo alto de una colina empinada, ofrece vistas excepcionales de la Ciudad Vieja y hacia los Alpes.

El Rosengarten se convirtió en un parque público en 1913, ahora, tiene más de 200 tipos de rosas además de cientos de diferentes tipos de rododendros, azaleas e iris. También encontrarás un estanque (que está salpicado de hermosos lirios en julio), además de esculturas, fuentes y un pabellón.

Verde y tranquilo, es el lugar favorito para familias locales y parejas. Cuando lo visitamos, incluso había una clase de yoga matutina en el gran césped con las vistas más increíbles de la ciudad. Y también hay un gran parque de juegos aquí, así que si estás visitando Berna con niños, este podría ser un buen lugar para desfogarse…

El mejor momento para visitar el Rosengarten es, por supuesto, en primavera y en verano cuando todas las flores han florecido. También es un buen lugar para ver la puesta del sol en Berna.

Puedes traer un picnic y parar aquí para almorzar, o disfrutar de una comida en el encantador Restaurante Rosengarten. Tiene precios razonables y una gran terraza al sol con vistas fabulosas.

CONSEJO: No te pierdas el banco de Einstein cerca del restaurante y con vistas a la ciudad. Este es uno de los cuatro bancos de Einstein en Berna y un buen lugar para una foto… Otro banco de Einstein que puedes ver fácilmente se encuentra en el Museo Histórico de Berna/Museo Einstein mencionado a continuación.

Museo Einstein / Museo Histórico de Berna

La conexión de Albert Einstein con Berna es fuerte: vivió aquí durante 7 años a principios del siglo XX. Además, Berna es donde desarrolló su famosa Teoría de la Relatividad y publicó algunos de sus trabajos más importantes. También impartió conferencias en la Universidad de Berna.

El Museo Histórico de Berna se centra en la historia antigua, arqueología y etnografía. El Museo Einstein es un lugar fascinante también, con muchas fotos, metraje y documentos conectados con su tiempo allí.

Los puntos destacados incluyen una carta de Einstein al presidente Roosevelt, advirtiéndole sobre las capacidades nucleares de Alemania, y el certificado del Premio Nobel de Einstein de 1921. Incluso puedes ver sus (algo poco impresionantes) informes escolares. También hay una gran cantidad de información sobre su vida privada, ¡algunos de ella bastante sorprendente!

Y si siempre te has preguntado qué es realmente la Teoría de la Relatividad, puedes descubrirlo a través de una película animada diseñada para mentes no científicas.

Consejo: El Museo Einstein está abierto todos los días excepto los lunes (consulta su sitio web para más información práctica). Necesitas al menos 1.5-2 horas para una visita rápida al Museo Histórico de Berna/Museo Einstein. Pero fácilmente puedes pasar medio día aquí también. También es un buen lugar para visitar en Berna cuando llueve.

La Casa de Einstein

La Casa de Einstein, situada en el encantador casco antiguo de Berna, es otro destino de gran atractivo para los visitantes. Si el tiempo no te permite explorar el Museo Einstein, esta casa puede ser una excelente alternativa. Ubicada en pleno centro de la ciudad, dedicarle entre 15 y 30 minutos a tu visita será suficiente. Aunque cabe mencionar que no es posible comparar ambos museos entre sí, ya que cada uno ofrece una experiencia distinta.

Aquí, en la Casa de Einstein, tendrás la oportunidad de explorar el apartamento ubicado en el tercer piso donde Einstein residió de 1903 a 1905 junto a su esposa Mileva Marić y su hijo Hans Albert. Durante esta época, Einstein trabajaba para el Instituto Federal Suizo de la Propiedad Intelectual. Pero lo más destacado de su estancia aquí fue la redacción de los artículos del Annus Mirabilis, que marcaron un antes y un después en la comprensión científica del universo por parte de la comunidad científica.

El museo se divide en dos plantas: una dedicada a la ciencia y la otra, diseñada para recrear cómo era la vivienda cuando la familia Einstein residía allí.

Es bueno saber: El acceso se realiza por una escalera empinada y no hay ascensor disponible, lo que podría no ser adecuado para personas con problemas de movilidad.

Información práctica: La Casa de Einstein abre sus puertas todos los días, excepto durante algunas semanas a finales de diciembre y enero. Los horarios de apertura son relativamente breves, normalmente de 11:00 a 16:00 h.

Consejo: Dada su popularidad y el reducido espacio del apartamento, ¡puede llenarse rápidamente de visitantes! Por ello, te recomendamos planificar tu visita a primera hora del día o hacia el final, cuando suele haber menos afluencia de turistas.

El Edificio del Parlamento Suizo

La Asamblea Federal de Suiza es una de las democracias más antiguas del mundo y su sede, el Edificio del Parlamento de Berna, de estilo renacentista (Bundeshaus), es una visita obligada. No solo por la belleza de su fachada, sino también por el impresionante interior adornado con vidrieras espectaculares, madera tallada con elegancia y esculturas magníficas.

Las dos cámaras del Parlamento Suizo se alojan en el bloque central bajo la cúpula, mientras que las alas albergan diversas agencias federales y la biblioteca federal. Aunque el acceso está abierto al público, se restringe cuando el Parlamento está en sesión.

Consejo: Las visitas guiadas al Edificio del Parlamento son gratuitas y duran aproximadamente una hora. Es necesario reservar con bastante antelación debido a su gran popularidad. Para más información, haz clic aquí.

No dejes de admirar la espectacular fuente en la Bundesplatz (Plaza del Parlamento) situada en el exterior. Con sus 26 chorros, representa a los 26 cantones de Suiza. Este lugar transmite una atmósfera relajada y acogedora, siendo un punto de encuentro para los locales. Además, ocasionalmente podrás disfrutar de mercadillos durante el día o de impresionantes espectáculos de luces sobre el edificio del Parlamento por la noche.

Consejo: Más allá del Bundeshaus se encuentra la Bundeshausterrasse, un mirador muy frecuentado que cuenta con un pequeño parque y bancos para descansar. Aquí también encontrarás tableros de ajedrez gigantes donde es común ver a los locales disfrutar de una partida. Además, se puede observar un modelo 3D del Edificio del Parlamento y un panel orientativo que señala los picos montañosos visibles en la lejanía.

Nydeggbrücke y Untertorbrücke

El puente Nydeggbrücke, situado en el extremo este del casco antiguo de Berna, es parte del patrimonio nacional suizo y destaca especialmente por las vistas pintorescas que ofrece de la ciudad.

Desde este punto, también es visible el Untertorbrücke, un puente de piedra más antiguo que históricamente era el único cruce sobre el río Aare.

Ambos puentes, junto con sus alrededores, forman una estampa de gran belleza. Aunque tu visita a Berna no incluya específicamente el Foso de los Osos o el Parque Rosengarten, merece la pena acercarse a estos puentes para disfrutar de las maravillosas vistas de la ciudad y del río.

Centro Paul Klee

Situado en las afueras este de Berna, el Centro Paul Klee se destaca como el museo de arte más destacado de la ciudad.

Este impresionante museo acoge aproximadamente 4.000 obras de Paul Klee, el pintor germano-suizo considerado uno de los artistas más significativos de los albores del siglo XX. Aquí, en Berna, es posible admirar algunas de sus piezas más emblemáticas.

Dado que muchas obras de Klee son extremadamente sensibles a la luz, se exhiben de manera rotativa junto a obras de otros artistas. Se muestran entre 120 y 150 obras de Paul Klee, y la colección se renueva constantemente.

El edificio que alberga el museo merece una visita por derecho propio. Diseñado por el arquitecto italiano Renzo Piano por encargo de la hija de Klee, quien legó toda su herencia a la ciudad de Berna, el edificio, espacioso y luminoso, evoca un paisaje ondulante y resulta realmente espectacular.

Es bueno saberlo: El museo abre sus puertas todos los días, excepto los lunes y algunos feriados. Organizan visitas guiadas y talleres creativos para todas las edades. Para más información, visita su sitio web.

Cómo llegar: Si no dispones de coche, puedes llegar fácilmente en el autobús n.º 12, dirección 'Centro Paul Klee', desde el casco antiguo de la ciudad. El viaje dura apenas de 10 a 15 minutos.

Hammam & Spa Oktogon

Ocupando cuatro pisos, este spa único se encuentra en un hermoso edificio que en tiempos fue la sede del primer calentador de gas de Suiza. Proporciona una experiencia verdaderamente especial que incluye calentamiento, limpieza, exfoliación, baño y sala de vapor, siguiendo un proceso fijo.

Es bueno saberlo: La cultura en Berna puede ser menos pudorosa respecto al cuerpo de lo que uno podría esperar, así que prepárate para alguna desnudez durante tu experiencia en el spa. Es una actividad exclusiva para adultos (desde los 16 años), excepto en algunos días del año cuando se organizan jornadas especiales para niños.

Consejo: Las horas más tranquilas para visitar son por la mañana o alrededor del mediodía. Para más información y horarios de apertura, consulta su página web.

Compras en Berna

Si buscas una escapada urbana más relajada, ¡Berna también ofrece excelentes opciones de compras y gastronomía!

Sus 6 km de arcadas cubiertas en la Ciudad Vieja te protegen del clima mientras exploras boutiques de lujo y tiendas. Encontrarás desde artículos de lujo hasta cuchillos suizos tradicionales y recuerdos relacionados con Einstein.

Y en cada rincón, te encontrarás con osos pardos, el símbolo de la ciudad. Desde juguetes de osos de peluche hasta galletas, chocolates en forma de oso y más.

Si te interesa visitar mercados locales, Berna ofrece varias opciones. Hay un mercado de verduras y flores en Bundesplatz todos los martes y sábados por la mañana. El tercer sábado de los meses cálidos, el Mühleplatz acoge el mayor mercado de pulgas de Berna. Y si visitas en Navidad, no te pierdas los mercados festivos en Waisenhausplatz y Münsterplatz.

En cuanto a la oferta culinaria, Berna cuenta con numerosos restaurantes encantadores, con una amplia oferta de cocina suiza e italiana. En verano, disfruta de las terrazas de los restaurantes cerca del Käfigturm. Aunque es un lugar concurrido por turistas, el ambiente es acogedor y la comida, de alta calidad.

Consejo: Para los amantes del chocolate, una visita a una de las tiendas de chocolate Läderach es imprescindible. Ofrecen algunos de los mejores chocolates suizos que podrás degustar, disponibles en todo tipo de sabores imaginables.

Gurten

El Gurten, conocido cariñosamente como "Güsche" por los habitantes de la zona, es una colina situada al sur de Berna. Aunque el Gurten no es particularmente alto, con sus 858 metros de altura, ofrece unas vistas panorámicas espectaculares de la ciudad y los Alpes.

No obstante, las vistas no son comparables a las que podrías encontrar en el Monte Titlis, el Paraíso Glaciar del Matterhorn, Gornergrat o el Monte Pilatus debido a su menor altitud. Lo que hace especial a Gurten es su atmósfera más íntima y local, lejos de las multitudes turísticas.

En la cumbre del Gurten Kulm, se encuentra una torre de observación de acceso gratuito y numerosos senderos escénicos que serpentean a través de densos bosques y praderas floridas. Para los más pequeños, hay un encantador tren en miniatura. Y en invierno, si la nieve lo permite, se puede disfrutar de pistas de trineo e incluso de esquí para niños.

Es bueno saberlo: A mediados de julio se celebra el Festival de Gurten, atrayendo grandes nombres de la música. Durante este periodo, el lugar se llena, así que prepárate para posibles colas.

Cómo llegar: Llegar a Gurten es sencillo con el tranvía n.º 9 desde el centro de Berna, un viaje de unos 20 minutos. Al llegar, el funicular te lleva a la cima en pocos minutos, saliendo cada 15 minutos.

Información práctica: El funicular de Gurten opera diariamente durante todo el año, excepto unos pocos días por mantenimiento anual. Comienza a funcionar a las 7 AM y continúa hasta la noche. Para más detalles, visita el sitio web oficial. Normalmente, no es necesario reservar con antelación, y si tienes el Swiss Travel Pass, también es válido aquí.

Valle de Emmental

A unos 30 km al este de Berna se encuentra el Valle de Emmental, un destino recomendado si dispones de más tiempo.

A menos de una hora en coche desde Berna, el Emmental ofrece un paisaje típicamente suizo, con colinas verdes, vacas pastando y casas de campo, todo ello con el impresionante telón de fondo del Oberland bernés.

Este lugar es famoso por su queso. Si pasas por aquí, no dejes de visitar la Experiencia Kambly en Trubschachen para degustar famosas galletas suizas y la quesería de demostración para aprender sobre la historia del queso suizo. La Emmentaler Schaukäserei en Affoltern ofrece visitas guiadas interesantes.

Consejo: Algunas excursiones desde Zúrich o Lucerna incluyen una parada en el Valle de Emmental, combinando lo mejor de Berna y sus alrededores en un solo viaje.

Si tienes tiempo, el valle es perfecto para el senderismo y el ciclismo. En invierno, se transforma en un paisaje nevado ideal para el esquí y las caminatas con raquetas de nieve.

Es bueno saberlo: Aquí se inventaron las bicicletas eléctricas, perfectas para explorar las rutas montañosas. Si planeas pasar más tiempo, investiga sobre alquileres y rutas recomendadas.

Tours en Helicóptero

Si buscas una experiencia única en Suiza, considera un vuelo escénico en helicóptero sobre los Alpes. Berna, con su ubicación central y un pequeño aeropuerto, es el punto de partida ideal para estas aventuras.

Desde Berna, puedes elegir entre una variedad de tours en helicóptero, desde vuelos cortos sobre la zona hasta excursiones más largas hacia Interlaken o las famosas montañas de la región de Jungfrau.

Consejo: Si el presupuesto no es un problema, hay vuelos panorámicos que te llevan sobre los Alpes suizos, incluyendo el Matterhorn en Zermatt.

Es bueno saberlo: Los tours en helicóptero operan durante todo el año desde Berna. Los tours recomendados suelen permitir cancelaciones gratuitas hasta 24 horas antes, lo que te da flexibilidad en caso de mal tiempo.

Mapa de los lugares imprescindibles para ver en Berna

Para facilitarte la orientación, hemos elaborado este mapa que señala todos los lugares y atracciones de la ciudad de Berna mencionados en este artículo. No solo encontrarás los principales puntos de interés, sino también todas las fuentes, miradores y demás.

A continuación, también te ofrecemos algunos datos prácticos para tu visita a Berna.

Cómo utilizar este mapa: Con el ratón de tu ordenador (o con los dedos en una pantalla táctil) puedes acercar o alejar la vista. Haz clic en los iconos para obtener más información sobre cada lugar. Para acceder al índice, haz clic en la flecha situada en la esquina superior izquierda. Si quieres añadir este mapa a tu cuenta de Google Maps, haz clic en la estrella junto al título del mapa. Para consultar el mapa guardado en tu smartphone o PC, abre Google Maps, selecciona el menú y dirígete a ‘Tus lugares’/‘Mapas’. Si prefieres imprimir el mapa o verlo en una ventana más grande, selecciona ‘Ver mapa ampliado’ en la esquina superior derecha.

¿Merece la pena visitar Berna?

Con tantos lugares asombrosos que ver en Suiza y el tiempo limitado, quizás te preguntes si merece la pena incluir Berna en tu viaje... La respuesta depende en gran medida del tiempo del que dispongas.

Pero, definitivamente, Berna merece una visita. Gracias a su magnífica ubicación, su pintoresco casco antiguo y su ambiente acogedor, Berna se cuenta entre las ciudades más encantadoras de Suiza. Además, está bien conectada por transporte, lo que facilita su acceso. Y en solo un día puedes recorrer la mayoría de sus emblemáticos monumentos. Esto la hace perfectamente integrable en cualquier itinerario por Suiza.

¿Cuánto tiempo necesitas en Berna?

Como ya hemos adelantado, en un día puedes disfrutar de lo mejor que Berna tiene para ofrecer. Por ello, la mayoría de los visitantes dedican un día a la ciudad, aunque también hay tours de un día desde otras importantes ciudades suizas.

Consejo: Un excelente plan para una excursión de un día es el tour por Berna y el Valle de Emmental desde Zúrich o Lucerna.

Si decides pasar al menos una noche, es decir, dos días en Berna, tendrás la oportunidad de explorar todos los rincones de nuestra lista.

Dónde alojarte en Berna

Si tu plan es pasar una o dos noches en Berna y llegas en tren, prácticamente cualquier hotel del casco antiguo será una buena opción. La estación de Berna se encuentra en el núcleo central de la ciudad, lo que te permitirá llegar a pie a la mayoría de los hoteles en solo unos minutos.

Aquí tienes algunas de las mejores opciones de alojamiento en el centro de Berna, adaptadas a diferentes presupuestos:

• Hotel Schweizerhof Bern & Spa (Muy Caro)
• NH THE BRISTOL (Caro)
• Akomo Bern (Medio)
• Bern Backpackers Hotel Glocke (Barato)